a 'razón dialéctica', o sea el marxismo, es para Sartre, como para Kant la ciencia físicomatemática, el Faktum de que hay que partir, el saber con mayúscula. La `crítica' ha de consistir en re-hacerlo dialéctico y en existenciarlo.' Con estas palabras del filósofo español José Luis Aranguren podemos darnos una idea del inmenso esfuerzo que constituyó para Sartre dar forma a esta Crítica de la razón dialéctica (1960), que llegó a ser uno de los grandes pilares del pensamiento contemporáneo. Para el autor, el saber de nuestra época es el marxismo, pero para no quedarse en simple saber necesita del existencialismo obrando dentro de él para que deje de estar detenido, 'reificado', y vuelva a ser dialéctico, como en sus orígenes. La clarificación de las relaciones entre el marxismo y el existencialismo será, pues, uno de los problemas básicos de esta obra.