No somos víctimas de nuestra genética, ni de las circunstancias adversas que se nos presentan. Siempre hay mucho más por hacer cuando se cree que todo está perdido. Con profunda empatía, Stella Maris Maruso comparte historias reales de muchas personas que accionaron su laboratorio interior y lograron recuperar la salud a pesar de haber recibido un diagnóstico condenatorio. "No podemos dejar que otros elijan por nosotros cómo vivir la experiencia de una enfermedad o de una crisis vital, alejándonos de nuestro verdadero poder", dice la autora. Maruso anima a los lectores a descubrir el potencial bioquímico capaz de modificar el rumbo de su biología y de sus vidas.