Lejos de la tÃpica postal, La ruta del beso desanda el camino del romanticismo para apropiarse de los verdaderos besos, aquellos que se anhelan, se buscan, se consiguen ? o no- en el ciberespacio, en los cines condicionados, en los cabarets, en las despedidas de solteros, en los encuentros de solas y solos, en los márgenes del amor. El beso como maquina de narrar, como germen de biografÃas sexuales. Sin prejuicios y con genuina curiosidad, estas crónicas hacen visibles los ideales que moldean las conductas, los gustos, las iniciaciones, las esperas y las postergaciones de los individuos de una época y revelas asà su capacidad de seducir y desear.