"No existen ideas polÃticas sin un espacio al cual sean referibles, ni espacios o principios espaciales a los que no correspondan ideas polÃticas.". Esta fórmula de Carl Schmitt supone que en toda investigación sobre las relaciones entre espacio y poder, ambos términos se implican mutua y estrechamente. AsÃ, si un ámbito resulta circunscripto, o un principio espacial, definido, significa que allà actúa un contenido polÃtico disimulado, y con mayor fuerza precisamente donde se dan calles, casas, territorios, ciudades.