«Los Upanishads nacieron hace unos cinco mil años. Se trata de una comunión secreta, una transmisión más allá de las escrituras, una comunión más allá de las palabras. En eso consisten los Upanishads: tú sentado en silencio, no solo escuchando mis palabras, sino escuchando también mi presencia. Las palabras solo son excusas en las que colgar el silencio. El silencio es el verdadero contenido, la palabra solo es el envase. Si te interesas demasiado por la palabra, te pierdes el espíritu»