Clarisa, la seño de Ciencias Naturales, tiene unos alumnos revoltosos pero brillantes. Se acerca la feria de ciencias y la consigna es el cuidado del medio ambiente, así que están investigando sobre abonos y otros barros fértiles, pero son muy poderosos y empiezan a crecer toda clase de plantas mutantes. A Clarisa le gustaría poder estudiarlas y convertirse en una eminencia de la biología, pero nunca hay tiempo: su clase le demanda toda la atención.