Querido Diario te cuento que por fin me decidi. ¡Una Escuela para Ogros hace unos dias abri! Asi escribe en su diario intimo nuestro querido ogro; que se canso de trabajar en los cuentos y decidio ser Director de escuela. Solo el es capaz de adiestrar a estos tiernos ogritos malolientes; y de sentirse orgulloso de que hablen con la boca llena y nunca se limpien los mocos.