En el reino Azul todos eran azules, menos la princesa, que se volvió marrón de tanto comer chocolate. Y en el reino Rosado todos eran rosados, menos el príncipe, que de tanto comer postres con vainilla se puso de color amarillo clarito. Ellos, felices con su color, pero los demás... Los demás no tanto. A los azules sólo les gustaban los azules, y a los rosados, los rosados. ¿Quién se iba a enamorar entonces, del príncipe y de la princesa...?El príncipe Vainilla y la princesa ChocolateAutor: Norm